Los recordatorios de defunción no son muy habituales en España, pero sí están muy presentes en diferentes países del continente americano, por ejemplo.
Algunas familias los consideran convenientes por unos motivos u otros, así que, por si no estás muy familiarizado con el concepto, te contamos qué es con detalle gracias a la ayuda de nuestros compañeros de la oficina funeraria en Santander.
¿Qué son los recordatorios de defunción?
Son tarjetas o estampas que recogen información breve del fallecido, como su nombre y su fecha de nacimiento y fallecimiento, y que se entregan a quienes asisten al funeral.
También suelen incluir un pequeño texto de recordatorio o agradecimiento hacia quienes han querido ayudar a los familiares a sobrellevar su dolor, aunque sea con su mera presencia y sus palabras reconfortantes.
De esta forma, según cómo se diseñe y qué se incluya puede tener varios sentidos, siendo los más comunes los de recordatorio de la persona fallecida y los de agradecimiento.
Para los creyentes, además, es un forma de invitar a tener al fallecido presente en las oraciones.
¿Cómo es un recordatorio funerario?
Tiene formato de tarjeta o estampa díptica y rectangular para que resulte manejable.
Debe ser fácil trasladarlo y repartirlo.
Lo habitual es que lleven una imagen, que puede ser la de algún paisaje que transmita paz o la de algún símbolo religioso: un camino en medio de la naturaleza, la playa con el atardecer en el horizonte, un árbol, una cruz, etc.
Muchas familias eligen colocar la foto de su familiar fallecido, con el nombre y las fechas importantes junto a él.
Al abrirlo, el familiar o amigo encontrará también un texto que hará alusión a la persona fallecida, solicitará tenerle presente o agradecerá la asistencia, según haya elegido la familia.
¿Qué escribir en un recordatorio de fallecimiento?
La imagen es lo más visual y lo que se coloca en la portada del díptico, pero el texto es incluso más importante.
Debe ser algo cuanto más personal mejor, pero ofrecemos a continuación algunas ideas para inspirar.
Frases para recordatorios funerarios
La familia [apellidos] agradece la asistencia a todas las personas que se han sentido apenadas por el fallecimiento de [nombre del fallecido]. Cada gesto y cada palabra resultan reconfortantes en estos momentos de dolor. Esperamos que tengáis siempre presente a [nombre del fallecido] y que guardes con cariño las vivencias que con él/ella compartiste en vida.
Se ha ido un excelente padre, esposo y abuelo, pero el legado que ha dejado tras de sí pervivirá en nuestros corazones. Hoy le lloramos, pero lo notaremos presente en cada recuerdo y cada vez que pongamos en práctica alguna de sus enseñanzas. Porque quien es recordado no muere: vive en nuestros corazones.
No hay nada más hermoso que hacer feliz a las personas que te rodean, y tú lo hiciste. Esperamos que te fueras sabiendo que todo ese amor que tú nos ha dado era recíproco, y que descanses en en paz. No habrá día en el que no te recordemos, pero lo haremos con el cariño y la felicidad que lograste proporcionarnos.
Jesús dijo: ‘Yo soy la Resurrección y la Vida. El que cree en mí, aunque muera, vivirá, y todo el que vive y cree en mí no morirá jamás’. Queridos amigos, os pedimos que tengáis presente a [nombre del fallecido] en vuestras oraciones, para que hoy mismo pueda descansar en la paz de Dios. Él/ella resucitará cada día en nuestra memoria.
Además de estos pequeños textos, en la portada del díptico o en una de sus caras se puede colocar una frase más corta. Te hemos dejado ideas en uno de nuestros posts, pero recogemos algunas aquí:
Hiciste bellas las vidas de quienes te rodeamos. Tu legado vivirá para siempre.
Nos separó la muerte, pero el amor nos mantiene unidos.
Quererte fue fácil, pero olvidarte será imposible.
¿Dónde comprar recordatorios de defunción?
Lo habitual es que sea la oficina funeraria quien se ocupe de tramitar el pedido, recibir los recordatorios y ponerlos a disposición de la familia.
Es uno de los servicios opcionales que ofrecen las funerarias si los seres queridos del fallecido así lo desean.